A lo largo
de mi vida he viajado mucho y desde muy joven por mi país. Es usual el
escuchar; cientos de historias, mitos, cuentos y demás cosas salidas de la
realidad o la fantasía de la gente lugareña.
Sucede que
en un viaje que hice en el año 1973, me contaron una historia, que ha decir
verdad; me puso los pelos de punta.
Viajaba en
un autobús, con destino a la ciudad de Piura (norte). Junto a mi estaba una
señora de unos cincuenta años aproximadamente. Yo tenía unos veinte y cuatro a
pesar de la diferencia de edades, entablamos una conversación “amena” ella era
de la ciudad de Piura y me hablaba de su tierra y mil cosas más.
El bus seguía
su trayecto, unos dormían, otros leían o conversaban, como era mi caso. El
viaje transcurría en la noche, para poder llegar a destino muy de mañana.
De pronto
pasamos por una zona, donde el camino se hacia sinuoso y bastante peligroso,
para los vehículos que transitaban por ahí. Solo se podía divisar, hasta donde
alumbraban las luces del bus; lo demás, era mas obscuro que el mismísimo color
negro.
Es en ese
momento que la señora con la que sostenía la conversación, me comenzó a contar
una de esas historias.
Sucede que en
este existe una cueva, donde está la estatua de una mujer tallada en piedra de
color blanco, la cual se puede apreciar en el día, pero en las noches sale y
camina por la carretera y si algún vehículo reduce la velocidad, suele subirse
a él y conducirlo al abismo o apropiarse de su alma, llevándoselo al otro
mundo. Muchas veces se ha sabido que incluso,
puede subir a un bus y confundirse con algún pasajero.
Este
espeluznante relato, me dejo algo paranoico, tanto así que casi no miraba a
aquella señora, pensando que podía ser ella misma aquella estatua.
Pase un mal
momento, hasta que comenzó a amanecer y nuestro destino ya estaba muy cerca y
por “suerte” no había sucedido nada extraño. (me volvió la alama al cuerpo)
¿Realidad 0 fantasía
¿ No lo sé, pero si se que hay miles de historias y relatos, que por algo
forman parte de la cultura de cada lugar.
Efecticamente, hay muchas historias de esas. Cuando era joven me impresionaba mucho escucharlas, ahora con la edad....una se hace a todo y te acostumbras a oír cosas. Muy agradable de leer tu entrada, José Luis. Un abrazo
ResponderEliminarMe gustan las leyendas que hay en casi todos los lugares de la tierra, algunas son espeluznantes que yo me pregunto de donde habrán salido y llego a la conclusión de que en verdad tuvo que suceder algo extraño y que luego al contarlo las personas que lo escuchan lo entienden de formas diferentes que a la vez son trasmitidos y comprendidos de formas también distintas y con los años se convierten en historias muy diferentes de lo que fueron en realidad.Sabiendo ya lo sabido, creo que todas las leyendas parten de una realidad y son trasformadas con los años.Saludos
ResponderEliminarHay leyendas muy impactantes.
ResponderEliminarA saber...
Un abrazo.
Debiste de pasarlo un poco regular. A mi me gustan las historias pero si me llego a encontrar en tu lugar, no se que habría hecho.
ResponderEliminarSe te da bien contar cosas así y además lo haces muy bien.
Espero otra...
Un fuerte abrazo y un besazo.